Si algo agradezco de mi constitución
es el artículo 14.
“Los españoles son
iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón
de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o
circunstancia personal o social”
Creo en la igualdad entre
personas, en el respeto, en que hay lugar para todos en este mundo que puede
ser tan maravilloso, a la vez que duro con inclemencias meteorológicas como huracanes,
tsunamis, terremotos, deberíamos aprender todos lo insignificantes que somos, un
soplo y adiós.
Esto debería ser suficiente
para que las personas llegarán a mostrar su mejor cara ante sus semejantes, para
que empecemos a pensar en los demás de una forma más humana, más sensata, con
lo bonito que es compartir, disfrutar juntos, como podemos hacernos tanto daño,
desearnos tanto mal.
Os contaré algo, mi corazón,
mi ser se alegran cuando ve el bien, en cualquier lugar, mis ojos derraman
lagrimas al ver que el bien triunfa, que lo que parecen milagros se hace
realidad, sé que hay muchas personas que sufren y que algunos no verán amanecer,
mis ojos se llenan de lágrimas deseando que Dios obre en todos esos lugares
donde las personas sufren y ruegan al creador por la vida de alguien. Por eso
hoy os voy a pedir una oración por el bien de todos los que sufren, unamos
nuestras humildes oraciones para que el amor de Dios se derrame sobre la
tierra, quiero bendecir a todos mis semejantes, que el bien crezca en vosotros
y os haga felices. Soñemos con un mundo mejor y todo empezará a cambiar. Deseo
que seáis felices.
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