El mundo tiene cosas malas y
también de buenas, una que a mí me encanta es las olimpiadas, ese lugar donde
cada cuatro años los mejores de cada país compiten por poder decir, soy, somos
los mejores del mundo en una especialidad, lo considero sano el competir por
cualquier rama del deporte, mismas igualdades, mismas oportunidades, personas
que se respetan los unos a otros, defendiendo la bandera de un país al que aman
y por el que están dispuestos a llevar sus fuerzas hasta el límite.
Eso es algo tan sano y tan
importante, personas luchando por conseguir marcas, por sus intereses, los de
su país, respetando las normas de cada disciplina. Pues ahora imaginaros las
olimpiadas de Paralímpicos, no os merece respeto ver personas que se sobre
ponen a su físico para demostrar que aún estando mermados físicamente son
capaces de conseguir grandes obras, grandes metas, grandes logros. El ser
humano es maravilloso, doy fe de ello.
Hay un anuncio que me
encanta, es cuando un hombre le dice a una máquina, nosotros tenemos las ganas,
es verdad día tras día, muchísimas personas superan la adversidad, a la
enfermedad, para llevar a cabo ese milagro, que no parece ser tal, pero que
solo personas llenas de un espíritu tan grande son capaces obrar la maravilla
de superarse.
Por todos ellos, dar las
gracias y animarlos a conseguir nuevos retos, nuevas metas, nuevos sueños,
deseo que entre todos hagamos todo un poco mejor. Si alguien busca personas donde
fijarse que se crecen ante la adversidad que busque en las historias de Paralímpicos.
Suerte y mucha fuerza.
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