La compra inteligente.

 

Las personas solemos hacer las cosas de forma impulsiva y como decirlo este no es un buen hábito para nada y menos para realizar compras, es indudable que toda persona le apetece permitirse un capricho, en forma de pastel, comida favorita, en fin, seguro que se os ocurre alguna.

Uno debería tener una base sólida de despensa, en base a aceite, vinagre, harinas, cereales, pastas, arroz, sal, lácteos, café, condimentos, fruta, verdura, huevos y algunas latas de conserva que pueden sacarte de algún apuro. Es claro que cada persona según sus preferencias tendrá una despensa, un poco más personalizada que otra, pero en base todas tendrán mucho de parecido.

Entiendo que ir a comprar teniendo el menú de la semana, puede facilitar mucho las cosas, ya que el comprar por si hago esto o aquello, no es más que una forma más de mal gastar nuestros ahorros, por eso tener una previsión de los menús que vamos a realizar durante la semana, consensuada por todos las personas que forman la unidad familiar es fundamental para crear buenos procedimientos, buenos hábitos que el tiempo os agradecerá en general, en tiempo, ahorro,  formar dietas más saludables, claro está que son muchas las personas que no se plantean estas cosas que son tan simples, pero que aportan muchas cosas buenas a nuestras vidas.

Como decirlo, damos importancia a muchas cosas que no la tienen y olvidamos otras que, si la tienen, como una compra inteligente. Muchas veces en las cosas pequeñas se nos escapan el obtener grandes cosas.